Llegamos a Praga el 16 de agosto, y la ceremonia de inauguración sería al día siguiente a las 19:30h, así que ese primer día nos dedicamos a pasear por la ciudad, conocer sus sitios más representativos: la plaza de la Ciudad Vieja, el reloj astronómico (increíble obra de ingeniería del 1410), la Iglesia de Týn, las callejuelas hasta el Puente de Carlos con la Torre del puente de la Ciudad Vieja, el barrio judío donde se asentaba el guetto y donde todavía se conservan varias sinagogas y el antiguo cementerio judío, y por supuesto primera toma de contacto con el Castillo de Praga, que en realidad no es un castillo sino un conjunto palaciego enorme de diferentes edificios y su majestuosa Catedral de San Vito.
Ya en esa primera toma de contacto con Praga os lo confieso…quedé prendada de la ciudad. Me pareció ecléctica y bella en su caos arquitectónico y en su orden desordenado. Me pareció un milagro que pueda conservarse como lo ha hecho a pesar de todo lo que ha vivido y soportado la ciudad.
La tarde del 17 nos fuimos al hotel donde se jugaba el campeonato, el Top Hotel Praga a unos 17 Km de la ciudad. Un hotel inmenso que si bien en sus instalaciones comunes calificaría de aceptable en relación a la categoría que tiene…es todo desilusión al llegar a sus habitaciones. Nos quedaremos con lo positivo, la delegación española estaba en el mismo hotel donde se jugaba, lo que facilitaba los horarios.
De momento solo habíamos llegado unos pocos, faltaba el grueso de la expedición que no llegaría al hotel hasta las 21:30h, y que por lo tanto se perdería la ceremonia de inauguración.
La ceremonia fue una sorpresa, ya que tuvimos la oportunidad de ver por primera vez un ajedrez viviente, en el que las piezas luchaban en cada uno de sus ataques, las damas tenían dos formas curiosas de “matar” al enemigo (veneno en una copa o con una daga tras engañar al rival). Tambores que marcaban ritmos, e incluso la representación de la muerte que era la encargada de retirar las piezas que iban “muriendo” sobre el tablero. La partida finalizó en tablas y los reyes junto al resto de su séquito firmaron la paz mediante el intercambio de sus coronas. Un espectáculo precioso la verdad.
Hubo representación teatral típica de la zona, baile regional y finalmente un fin de fiesta con fuegos artificiales que nos pusieron una sonrisa a todos.
El 18 por la mañana la delegación española con Yudania Hernández al frente, los entrenadores de la FEDA (Jacobo Caselas, Jesús de la Villa, Ernesto Fernández, Jordi Magem, David Martinez “Divis”, Carlos Matamoros y Josep Oms que fue quien trabajaría con Pablo Luis) y el psicólogo Carlos Martinez, nos explicaron los cambios en los horarios, nos entregaron las acreditaciones y dieron el polo de la federación española a los 33 jugadores, para mí 33 valientes. La delegación al completo éramos 74 persona.
Los días de la competición son muy similares, por la mañana cada jugador prepara su partida con su entrenador (había chavales que iban con el suyo propio), entre 45 min y 1 hora. Los peques (sub8, sub10 y sub12) además tenían una hora de sesión grupal con el psicólogo. Comíamos o como calificó el gran Miguel Santos Ruiz medalla de bronce en sub18 al finalizar el campeonato, “nos alimentábamos”. Según Miguel la comida se disfruta en nuestro caso no era así J . Descanso hasta las 14:45h momento en el que nos dirigíamos a la sala de juego, pues las partidas empezaban a las 15h.
Pensad en nuestro Campeonato de Mallorca, en la última edición creo que eran casi 250 niños. O en Salobreña donde podemos tener más de 140 niños jugando. Imaginad ahora ¡más de 1.300 niños! ¡Impresionante!
Los dos primeros días ves que las familias de otros años se conocen y evidentemente hacen más rápidamente “piña”, pero de forma rápida y paulatina, nos van “acogiendo” a los novatos que por primera vez nos vemos en una de estas dimensiones. Hay familias que ya es su tercer o cuarto europeo, y que ya han estado en uno o varios mundiales. La experiencia es un grado como dice el refrán. Hay familias completas, y chavales que solo han venido con la madre o el padre, o que han venido con una amiga de la familia que venía con su hija. La mayoría de los mayores, sub16 y sub18 ya van solos, pero son fantásticos con los peques. No han pasado 48 horas, se juega la ronda 2 y las familias ya estamos entremezcladas, cuidando todos de los niños de todos, jueguen o no. Organizándonos gracias al grupo de WhatsApp que montó la fantástica Yudania. Los veteranos nos explican porque los niños de antiguos países del este aunque vengan sin ELO o tengan uno muy bajo son buenísimos, lo duro que se vuelve el campeonato siendo tantos días, las dudas con el ritmo de juego,… La frase más repetida es: “no hay rival fácil y aquí menos”. Parece un mantra de padres a hijos…
Y a medida que el campeonato avanza, nos vamos haciendo más y más piña. Montamos las mesas del comedor para el grupo, uno servilletas y cubiertos, otros aguas, otro refrescos…, compartimos cervezas (muy buenas por cierto), “fiesta de peques” en las habitaciones, pasapiezas, mensajes en el chat para localizar donde está uno o el otro.
No creáis que los chavales después de las preparaciones, la charla y las partidas de media de más de 3 horas, el análisis de la partida, se habían hartado de ajedrez…que vaaaaaa! Para nada, el juego oficial era el pasapiezas o las partidas de rotación (el que pierde se levanta y deja sitio).
Compartir impresiones y cerveza con personas tan amables y con tan amplio conocimiento del mundo del ajedrez y específicamente del ajedrez juvenil como Jesús de la Villa, Jordi Magem, Carlos Martínez, o esas tartas que se comía David Martínez por la tarde para repasar las partidas con sus jugadores (¿estará haciendo lo mismo ahora con las féminas del equipo olímpico en Baku donde él está como capitán?)
Quedarte esperando a que salga no tu hijo sino el de otra mamá, el chaval que lleva jugando 4 horas, es un sub10, y ya no queda casi nadie esperando. Y sale y ha perdido, cuando estaba ganado.
Llevarte a los chavales a jugar a fútbol, por prescripción del gran Jesús de la Villa, para que se oxigenen y terminar jugando un Italia – España.
Ver como salen 3 de los nuestros (3 derrotas: Javier Habans sub8, Marc Carbonell sub12 y Pablo Luis), que se han ido a buscar dentro de la sala, salen tras más de 3 horas y media, serios pero serenos, con las planillas, con ganas de ir a analizar y de mas ajedrez, cogiéndose de los hombros y animándose que mañana hay otra partida y que uno de ellos (Javier) a pesar de lo de hoy sigue teniendo opciones de hacer podio, y los dos mayores saben que el peque puede (Javier Habans quedó quinto en sub8 al finalizar el campeonato).
El día de descanso aprovechamos la mañana para ir de excursión buena parte de la delegación Española por la Ciudad Vieja.
Carmen la madre de uno de los jugadores sub14 organizó el que contáramos con una excelente guía, una chica catalana que vino a Praga para pasar 3 días y lleva en la ciudad viviendo 10 años. Nos explicó todo con una pasión y energía que a mí me dejó maravillada.
Atención al trio “calavera”: Ciro sub10 (tercero en el campeonato de España 2016), Javier (Campeón de España 2016 sub8 y sub10) y Pablo Luis, paseando por la Ciudad Vieja y sin que supieran que les estaba haciendo una foto Yolanda, la madre de Ciro. Nada que añadir a lo que la imagen explica J
Cuando os comentaba que éramos como una gran familia y nos cuidábamos los unos a los otros…mirad las chicas como paseaban por Praga…Valentina sub8, Puri sub10 y Blanca.
Catedral de San Vito en el Castillo de Praga
Torre de la Pólvora en Ciudad Vieja
A medida que la competición avanza, los nervios aumentan…pero es cierto que nos apoyamos más los unos a los otros, tanto en los momentos complicados como en los dulces que no sabes cuánto van a durar. La última ronda es un constante preguntarnos cómo van los tableros de arriba, y mirar las partidas…la delegación tiene opciones de varias medallas y las ganas, nervios, tensión…se comparten. Cuando sabemos que Salva ha ganado, las risas y alegría se apoderan del grupo que estamos en la terraza del hotel: ¡¡¡GRANDE SALVA!!!. Cuando vemos que Marta gana también su partida, las peques salen corriendo a la sala de juego para que a la puerta lo primero que se encuentre sea su aplauso. Seguimos pendientes de Miguel que si gana depende del desempate para alcanzar podio. Javier y Valentina, ya han ganado y sabemos que quedan entre los 5 primeros seguro. Miguel gana su partida y nos dicen que ha quedado 4. ¡Cachis! ¡Dichoso desempate! Pero es un excelente resultado. Al rato nos indican que no, ¡¡Miguel es bronce!!
Es ahora recordándolo, y se me sigue poniendo la piel de gallina.
Todos los entrenadores están viviendo una tarde jubilosa, salvo Josep Oms, que de sus 5 solo ha puntuado 1 jugador…dice que está por tirarse al lago del “jardín japonés” del hotel, entre las risas y sonrisas de todos. J
Todo amenizado por unas buenas jarras de cervezaJ, que por si todavía teníais dudas…es muy buena en Praga y más barata que el agua.
Y finaliza el Europeo….
Panorámica de la sala para la ceremonia de clausura
La delegación en la ceremonia de clausura.
Y el himno español sonó gracias a Salvador Guerra Campeón Sub14 de Europa 2016. ¡Y nos emocionamos!
Ellos cinco nos han llevado a lo más alto…Javier Habans quinto puesto de sub8, Valentina Plamenova cuarta clasificada sub8, Marta García subcampeona de Europa sub16, y Miguel Santos Bronce en sub18. Nos permitieron disfrutar en directo de un momento histórico en el ajedrez juvenil español. Yo sólo sé que ellos y el resto de 28 valientes junto a sus familias son ENORMES.
Los 33 valientes cierran una edición en la que hemos disfrutado gracias a ellos, a sus familias, a los entrenadores y a la Delegada de la FEDA Yudania mucho…pero no os engañéis…ésto …NO SON VACACIONES!!
Yo ya le he pedido a Yolanda madre de Ciro, a Javier Habans padre, a Ana Luisa madre de Diego Vergara (Subcampeón de España sub10 2016) y a Marisa madre de Marc Carbonell (Campeón de España sub12 2016) que nos envíen fotos desde Rumanía el año que viene. La ilusión es si se confirma que Santiago de Compostela es sede del mundial Sub8, sub10 y sub12 en el 2018…poder estar ahí con ambos …Blanca y Pablo Luis J
Mucho de ajedrez no os he hablado, así que le he pedido por favor a Sergio Estremera que aporte el elemento ajedrecístico que yo no tengo.